Seguinos en Facebook

PS Diversidad de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires

Secretaría de Diversidad Sexual – Partido Socialista de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

lunes, 12 de julio de 2010

Sobre las declaraciones de Bergoglio…

No dijeron nada cuando tenian que decir todo, en 1976 ... ahora movilizan a la plaza para privar derechos.

"No seamos ingenuos: no se trata de una simple lucha política; es la pretensión destructiva al plan de Dios", dice el cardenal Jorge Bergoglio, en una carta dirigida a los cuatro monasterios de Buenos Aires. Y añade "Aquí también está la envida del Demonio, por la que entró el pecado en el mundo, que arteramente pretende destruir la imagen de Dios: hombre y mujer que reciben el mandato de crecer, multiplicarse y dominar la tierra", insiste el prelado.


 

Por ello, frente a las declaraciones del Cardenal Bergoglio sobre el plan diabólico de destruccion de la familia, contraponemos la defensa por un Estado Laico y la fortaleza del hombre de la paz.


Grande Benedetti!

Allende


Para matar al hombre de la paz,
para golpear su frente limpia de pesadillas,
tuvieron que convertirse en pesadilla.
Para vencer al hombre de la paz,
tuvieron que congregar todos los odios,
y además los aviones y los tanques.
Para batir al hombre de la paz
tuvieron que bombardearlo, hacerlo llama,
porque el hombre de la paz era una fortaleza.


Para matar al hombre de la paz
tuvieron que desatar la guerra turbia.
Para vencer al hombre de la paz
y acallar su voz modesta y taladrante
tuvieron que empujar el terror hasta el abismo,
y matar más para seguir matando.
Para batir al hombre de la paz
tuvieron que asesinarlo muchas veces
porque el hombre de la paz era una fortaleza.



Para matar al hombre de la paz
tuvieron que imaginar que era una tropa,
una armada, una hueste, una brigada.
Tuvieron que creer que era otro ejército
pero el hombre de la paz era tan sólo un pueblo,
y tenía en sus manos un fusil y un mandato,
y eran necesarios más tanques, más rencores,
más bombas, más aviones, más oprobios,
porque el hombre del paz era una fortaleza.


Para matar al hombre de la paz,
para golpear su frente limpia de pesadillas
tuvieron que convertirse en pesadilla.
Para vencer al hombre de la paz
tuvieron que afiliarse para siempre a la muerte,
matar y matar más, para seguir matando,
y condenarse a la blindada soledad.
Para matar al hombre que era un pueblo
tuvieron que quedarse sin el pueblo.



 


Mario Benedetti



0 comentarios:

Publicar un comentario